Caminando por las calles de mi querido barrio. Villa Devoto, que no lo cambio por nada. A pesar de que queda lejos de todo. Pero tiene algo que no sé porque jamás me iría de acá.
Volviendo de los bares de la plaza Arenales (por más que algunos la llamen pza. Devoto) me crucé con todos los pebetes y pebetas...mamadera! que salían del cole. Del Copello. Aquel colegio que concurrí en los ochenta y noventa.
Como están los pibes...que comen, bulones? Son unas bestias. Todo sigue casi igual. La chomba blanca (que hace mucho era turquesa), los odiados pantalones grises. Y la remera de gimnasia sigue igual.
Caminaban en grupetes...rumbo a los queridos panchos de Peter!!! Una fija antes de gimnasia comerse esos panchos, que no se por que son taan ricos. En casa no salen asi.
Las mas chetitas, porque el Copello siempre fue cheto. Ese mote parece que no lo cambiará jamás. Compran alguna tartita o sanguchito en Belvedere. Un roti bien careta por estos tiempos. Cuando yo iba al cole, ahi estaba Filipos (hincha de San Lorenzo el dueño) una rotiseria muy buena pero sin tantos lujos y sin vidrios oscuros.
A los pocos metros, otro hincha de San Lorenzo, el kiosco del gallego. Quien no compró las figus en el kiosco del pelado de bigotes?
Hay algo que tampoco cambia. Los nenes con los nenes y las nenas con las nenas.
Algún caso aislado de parejitas con esos hermosos amores de secundario.
A la vuelta del cole secundario. Que haya por los ochenta, lo llamabamos "el colegio nuevo", esta el eterno y ahora remodelado cole de la primaria.
Ya casi pisando los 30, me llaman tanto la atención esos locos bajitos que parecen salidos de una seria animada, como las madres. Cuarentonas y (no tanto) que bajan de sus autos dejan a sus niños. Maquilladas y vestidas simulando ser Carolina Baldini. Están buenisimas "las mamis".
Segui caminando y me fui silbando bajito. Me reí mucho. Me acordaba de mi infancia, de mi adolescencia.
Será por eso que amo a Villa Devoto, que amo a Buenos Aires y no la cambio por nada. La extraño de lejos.La odio de día y la extraño de noche.
ABRAZO DE GOL
